La dificultad de etiquetar a un grupo en un estilo concreto siempre es algo positivo, algo que denota la calidad y la personalidad de la banda. En el caso de esta foramción creada en el norte de Londres en 2021, justo tras la pandemia, hay algo que sí les define con claridad: son británicos y se les nota, pero a partir de ahí la cosa se complica. Hay algo de Garage 60’s y de los Kinks primigenios pero es la ruptura del 77 la que marca su sonido, un sonido cuyas guitarras limpias pero angulares y cuyos ritmos simples y ultracuadrados traen ecos de la separación más intelectual del Punk (piensa en los primeros pasos de bandas como Wire o XTC) pero cuyas melodías directas les acercan a unos Buzzcocks o a unos The Jam. En cualquier caso: sus canciones funcionan de maravilla y en directo mejor todavía, así que aquí tenemos a una banda muy nueva y muy prometedora con tres singles a sus espaldas y que en esta gira española presentan su esperado primer LP.